Hola a todos,
Lo que más me ha llamado la atención es la problemática extensión del uso
de indicadores bibliométricos como el Factor de Impacto. Aunque son útiles
para la calidad de las revistas, estos indicadores se han vuelto en una métrica
para evaluar a los investigadores individualmente.
Frente a este uso problemático, iniciativas como la Declaración de San
Francisco sobre la Evaluación de la Investigación (DORA), recomiendan
explícitamente no usar métricas basadas en revistas, como el Factor de Impacto, para evaluar a
los científicos o en decisiones de promoción o financiación, abogando por
evaluar la investigación por su mérito intrínseco.
Para mí, esto se conecta directamente con la presión personal que suponen las
publicaciones para futuras acreditaciones, en una búsqueda constante en poder
encajar en revistas Q1 que son usadas como métrica para evaluar la calidad del
manuscrito. Es interesante ver cómo una iniciativa colectiva como DORA surge
precisamente para contrarrestar esta dependencia en el Factor de Impacto para
valorar a los autores y otorgar reconocimientos y estímulos, considerando que esta
práctica es un uso indebido y con limitaciones significativas.
Un saludo,
Luis Alfonso Menéndez
Es verdad, se trata de un problema estructural que produce sufrimiento a nivel individual. Esperemos que DORA y demás cambios hagan que esto mejore rápido.
ResponderEliminarToda la razón. Incluso nosotros como investigadores principiantes podemos sentir esa presión por publicar en revistas calificadas como Q1, dándole más importancia a la posición de la revista que a la calidad de la publicación.
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